Clos de Santa María está elaborado con un 90% bobal con una crianza de 9 meses en barricas de roble francés y americano y 10% garnacha con crianza de 18 meses en roble francés.
Vino perfectamente estructurado, equilibrado, elegante y sedoso, muy suave pero con personalidad. Gran paso por boca, con un largo final.
Nota: de esta añada se han embotellado 5207 botellas.